domingo, 30 de junio de 2013

El reto de la educación del siglo XXI: la generación N


     Desde que comenzó al final de los 80´s  no ha dejado de expandirse a una velocidad impensada, ha hecho cambios y ha marcado a toda una generación: hablamos de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).

No solo es informar y comunicar, es conectar, interactuar, entretener, jugar, investigar, propiciar las relaciones sociales, entre muchas, las opciones que nos brindan las TIC y que hoy por hoy han traspasado las barreras socio económicas y de distancia, lo que ha marcado y sigue marcando a la denominada Generación N, o Net, en alusión a la influencia de la red sobre ésta. Todo lo anterior inevitablemente ha incidido  en cómo se desenvuelven los integrantes de la sociedad en muchos ámbitos de ella, propiciando ambientes de intercambio cultural, social, económico e ideológico entre otros, y a un ritmo tan acelerado y lleno de cambios que caracterizan a la sociedad contemporánea.

 Los miembros de la generación N han ido creciendo a la par con el desarrollo de las tecnologías, y probablemente sea ése hecho el que genere en ellos la afinidad por las mismas.

Por ese  contacto directo y casi permanente con las TIC, se produce una gran influencia en el desarrollo de los miembros de esta generación, lo que les brinda unas características propias que los distinguen de otras generaciones anteriores. Dada la naturaleza interactiva, visual, auditiva y kinésica de las TIC, los miembros de esta generación son predominantemente activos, visuales, filiales al intercambio y emprendedores mediante el uso de las tecnologías. También se identifica en ellos una capacidad de atención muy amplia que les permite responder a muchos estímulos a la vez, lo que tiene una implicación pedagógica: que sea casi imposible mantener su atención en una sala de clases tradicional.

Si bien es cierto que las TIC, poseen una serie de beneficios que potencian sus habilidades, también es cierto que se enfrentan a riesgos dentro de ellas, particularmente en internet, donde se puede encontrar mucha información y de todo tipo, incluyendo toda la gran gama y cantidad de pornografía disponible solo con hacer un clic. También está el abuso del tiempo que ocupan frente a una computadora, quitando muchas veces las horas de sueño lo que  implica un riesgo físico y podría traer  trastornos emocionales, es por ello, que también es necesario que participen en actividades de esparcimiento, sociales y culturales, además de una apropiada actividad física para un desarrollo integral.


Los beneficios de la tecnología han sido aprovechados en muchas áreas, pero aún no se han aplicado con fuerza en la educación. Es difícil educar a una generación sin usar las tecnologías, pues son  éstas las que los marcan. El desafío de los docentes por tanto, radica en incluir estas tecnologías, no siendo suficiente con mucha o de muy alta calidad, sino utilizarlas como una herramienta con el fin de diseñar nuevos ambientes de aprendizaje centrados en los alumnos con sus distintos ritmos y estilos de aprendizaje, y así potenciar las habilidades que poseen para lograr  su correcta inserción y contribución social.


F Ferreiro, R. (2010). El reto de la educación del siglo XXI: la generación N. Apertura Nueva Época Digital, (5).

No hay comentarios:

Publicar un comentario